Primeros pasos en la Fotografía de Aves: consejos y técnicas
Por Jorge Ramírez
Es uno de los motivos fotográficos más atractivos para quienes disfrutan de la naturaleza. El mundo de las aves no solo requiere dominar la técnica y el manejo de tu cámara, sino que también de conocer el comportamiento de la mayor cantidad de especies que sea posible y aprender a desenvolverte en el terreno, para aumentar las posibilidades de éxito y no causar daño al hábitat o a la misma avifauna.
Si quieres comenzar en Fotografía de Aves, debes tener en cuenta que existen opciones de cámaras y ópticas relativamente económicas (también se puede con cámaras compactas) que te servirán para comenzar y obtener resultados satisfactorios. Pero como en muchas disciplinas, existen equipos más eficientes que facilitarán la tarea ante una misma situación, con una mejor tecnología y, claro, son más costosos. En cuál inviertas, dependerá de tu presupuesto y necesidades futuras.
Aquí te dejamos las principales recomendaciones para comenzar en este tipo de Fotografía:
-Uso de teleobjetivo: Lograr acercarnos con el zoom a las aves será fundamental en la mayoría de los casos, para lograr mayor detalle y nitidez. Hay muy buenas fotos de aves con composiciones en las cuales estas ocupan una porción menor del cuadro y cuyo propósito de mostrarlas en su entorno, pero una captura cercana es lo más buscado en esta disciplina.
Para esto, te recomendamos usar teleobjetivos de al menos 300 mm, pero será mucho mejor si puedes adquirir zooms de los rangos 100-400mm o 150-600mm, los que montados en una cámara de sensor recortado (apsc) te permitirán obtener fotos que aparenten una mayor distancia focal. Fíjate que los lentes cuenten con estabilizador (normalmente este tipo de objetivos lo traen) porque serán muy necesarios para compensar el movimiento.
Los teleobjetivos de marcas alternativas, como Sigma o Tamron, son de buena calidad óptica y representan una opción bastante menos costosa que los de marcas como Canon, Nikon, Sony o Fujifilm.
-Monopodes: Es muy aconsejable el uso de monopodes (o monipiés) porque estarás haciendo fotos con un elemento que te ayudará a estabilizar la imagen, lo que se traduce en mayor nitidez, al evitar la trepidación.
-Cámara fotográfica y técnica: Es ideal que tu cámara tenga una buena capacidad de disparar en ráfaga (al menos 5 cuadros por segundo). Las aves se desplazan rápidamente, muchas de ellas incluso cuando están entre las ramas, por lo que esta característica te dará opciones de captar el momento preciso que andas buscando.
El parámetro principal que debes controlar es el tiempo de exposición. Una velocidad de al menos de 1/1000 te permitirá congelar aves en vuelo y compensar la posible trepidación al disparar a mano alzada, pero hay especies que incluso no quedarán congeladas a esa velocidad, por lo que no temas en subir a 1/2000 o 1/4000 si la luz reflejada por el ave te lo permite. Usa siempre el autofoco continuo (AI Servo en Canon o Af-c en Nikon)
-Practica mucho y memoriza cómo funciona tu cámara: Una de las principales dificultades técnicas al fotografiar aves es una correcta exposición de la foto. Obturar a las velocidades mencionadas deriva en que estaremos permitiendo que el sensor reciba cantidades mínimas de luz, lo que deberemos compensar trabajando con la mayor apertura de diafragma posible. ¿Elevar el ISO? Ojo, debemos cuidarnos del ruido digital. Por lo tanto, dependeremos mucho de la hora del día y la cantidad de luz que refleje el ave. Preocúpate que el sol esté tras de tí o a un costado, para que el ave reciba una luz adecuada, a menos que estés buscando un contraluz y retratarla en silueta.
Considera que las aves son muy rápidas, inquietas y lo más probable es que si notan tu presencia van a volar. Por lo tanto, mide la luz y configura la cámara antes de comenzar a hacer las fotos, cambiando los parámetros apenas la luz sufra modificaciones, para estar listo al momento de la captura. También aprende a mover velocidad, diafragma e ISO de manera rápida sin mirar la cámara, por si necesitas ajustarlos al momento de estar mirando por el visor.
-Composición: En la medida que logres tus primeros registros nítidos y bien congelados, notarás que hay otros aspectos que darán un valor agregado a tus imágenes. Uno de estos es hacer la captura a la altura del ave, lo que permitirá darle protagonismo dentro del cuadro y notar el poder de su mirada. Claro, es algo más posible cuando están posadas en ramas o en el agua, pero si estás sobre roqueríos o en un cerro aumentas esa posibilidad. Por lo tanto, esfuérzate por buscar los mejores ángulos y una buena posición dentro de terreno.
Si además logras capturarlas con un fondo que esté lejos y bien expuesto, el efecto bokeh permitirá apreciarla separada del fondo y tener una foto muy interesante.
Existen muchas otras recomendaciones que abordaremos más adelante, pero estas son los principales tips para comenzar en este fascinante mundo. Aprovecha tus tiempos libres en casa para estudiarlas, aprender sus cantos y comportamientos, porque cada detalle te ayudará a tener más y mejores resultados fotográficos.


